lunes, 13 de abril de 2015

En el caminar de la vida, hay épocas, en las cuales nos llegan malas rachas con problemas por todos los lados, y en esos momentos, las circunstancias nos impiden ver con claridad, y nos bloqueamos pensando que no vamos a poder salir de esas situaciones tan negativas, así como nuestra imaginación llega a volar muy lejos con pensamientos oscuros pensando en todo lo malo que nos pueda seguir llegando. 

Es después, cuando ya lo vamos viendo de un color más clarito, cuando nos damos cuenta de que debemos intentar ser más positivos, que tan sólo son malas rachas, que, así como llegan, también se van, porque nada permanece quieto, todo continúa, porque todo tiene su caminar, y que de ese caminar negativo también se va aprendiendo, porque nos ayuda a ir madurando y creciendo como personas. 

También es cierto que, en esos malos momentos, las personas de nuestro alrededor, suelen ofrecernos su lado más cálido, humano y entrañable, yo así lo estoy sintiendo con muchas personas de mi entorno de la vida cotidiana, sintiéndome acariciada y arropada de cariño y de favores; es tanta la energía positiva que me están transmitiendo, que me siento bañada y protegida en ella, aunque también he de reconocer que, el sentimiento que me embarga interiormente, es el de estar en deuda hacia esas personas. 

Por todo ello, desde mis cálidas palabras y un entrañable abrazo, va mi eterno agradecimiento a todas esas grandes personas que están tan cerca de mí. 

Muchas gracias. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario